- Aceite de semilla de cáñamo: El cáñamo, o cáñamo industrial, es una variedad de la especie de planta Cannabis sativa. Sus semillas producen un aceite muy rico en ácidos grasos poliinsaturados. Contiene Omega-3, 6 y 9 y una amplia gama de minerales y vitaminas. El aceite de semilla de cáñamo es un super alimento, que no solamente es válido para comer, sino que también se considera un super alimento para nutrir la piel. Además, su naturaleza ligera, hace de este aceite un componente ideal para pieles de todo tipo.
- Aloe Vera: es una especie de planta suculenta del género Aloe. Se usa comúnmente en cosmética por su gelatina y agradable textura que ayuda a acondicionar y deja la piel tersa y joven.
- Manteca de Karité: es una manteca extraída de la nuez del árbol de karité africano (Vitellaria paradoxa) con una cantidad muy equilibrada de ácidos grasos monoinsaturados y saturados. Bajo en ácidos grasos poliinsaturados, lo cual se equilibra perfectamente con las características del aceite de semilla de cáñamo, que es de naturaleza más ligera pero nutritiva.
- Cannabidiol: el CBD es uno de los 113 cannabinoides que se encuentran en el cannabis, siendo el componente principal de la planta en las variedades de cáñamo. Existen múltiples estudios que avalan el CBD como un ingrediente excelente para mantener la piel protegida y saludable.
- Extracto de caléndula: Un extracto usado muy comunmente para cosmética. Tiene propiedades cicatrizantes y antisépticos. Además de ayudar a regenerar la piel.
- Agua de Hamamelis: Ayuda a limpiar poros, mejora lineas de expresión, acondiciona y calma la piel.
Propiedades:
- Reducir el enrojecimiento de la piel
- Mejora la calidad de la piel y recupera su apariencia juvenil
- Energiza la piel para un efecto antienvejecimiento